En Bodegas Yzaguirre cosechamos la tradición y el sabor con la vendimia en el Monestir del Tallat

En las viñas del Monestir del Tallat, el inicio de la vendimia marca un momento crucial en nuestra búsqueda incansable de vinos excepcionales con un sabor auténtico. En Bodegas Yzaguirre cada año damos inicio a esta tradición que ha sido parte de nuestra historia durante generaciones.

Control de la maduración para un sabor único

El proceso comienza mucho antes de que los primeros rayos de sol iluminen nuestras viñas del Monestir del Tallat. Realizamos un riguroso control de maduración de las uvas, tanto de nuestras fincas como de nuestros proveedores. Esto nos permite seleccionar el momento óptimo para la vendimia, cuando cada racimo ha alcanzado su máximo esplendor que garantizará un sabor excepcional.

En Bodegas Yzaguirre, creemos en preservar la integridad de nuestro fruto. Es por eso que todo el proceso de vendimia se realiza a mano cuando se recogen las viñas en el Monestir del Tallat. Cada uva es tratada con el máximo cuidado para asegurarnos de que llega a nuestras instalaciones en perfectas condiciones.

Una vez que las uvas del Monestir del Tallat llegan a las Bodegas Yzaguirre, comienza la fermentación alcohólica. Aquí es donde el arte y la ciencia se unen para transformar las uvas en vino. Dependiendo de sus características únicas, algunos de nuestros vinos se someten a una maduración en barricas de roble durante un año, mientras que otros descansan en tinas para su afinado. Esto garantiza que cada vino reciba la maduración adecuada para expresar la singularidad de nuestra región, la Vall del Corb, en la D.O. Costers del Segre.

Los sabores se consolidan con el coupage

Nuestra enóloga, con una experiencia y pasión inigualables, realiza el coupage. Esta es una etapa crucial en la que se mezclan diferentes vinos para lograr la armonía y la complejidad deseada. Sin embargo, utilizamos un proceso de filtrado extremadamente suave para preservar todo el aroma y sabor de nuestros vinos.

En Bodegas Yzaguirre, valoramos la tradición y la dedicación que se requieren para crear vinos excepcionales. La vendimia es mucho más que una tradición; es la continuación de nuestro legado de excelencia enológica. Cada cosecha es el resultado de la pasión y el compromiso con la calidad que nos ha impulsado durante generaciones.

Muy pronto, podréis disfrutar del fruto de esta cosecha y experimentar la verdadera esencia de nuestra región, la Vall del Corb, en cada sorbo de nuestros vinos.